lunes, 15 de noviembre de 2010

Capitulo 15


Tengo que admitirlo. Tenía bastante miedo de perder la batalla. Perder la batalla hubiera significado hacer lo que el Caballero del Bosque me ordenara. Perdería todo el respeto que había obtenido todo este tiempo. O tal vez nunca más volvería a vivir una hermosa aventura como las que vivo casi todos los días. No estoy seguro, pero pensándolo bien creo que me hubiera suicidado. No podría vivir sin ser caballero. Hubiera sido el pato de la fiesta. Todos hablarían mal de mí. Pero ahora nadie puede decir absolutamente nada malo de mi persona. No sé si seré el máximo, pero soy uno de los caballeros más respetados en este momento. No voy a permitir que se me suban los humos a la cabeza, pero los privilegios vendrán a montones en poco tiempo, de eso estoy seguro.

Capitulo 14


Nosotros pasamos hablando de nuestras aventuras. Todo caballero ocupa hablar siempre de aventuras o de amores. No se otros pero yo si ocupo esos dos temas. Me gusta tocar temas importantes, pero esos me encantan. Qué cosa me fue a pasar hoy, cuando lo recuerdo hasta me da cólera. Voy a respirar un momento mientras se me baja la cólera. Listo ya estoy un poco más calmado. Les voy a contar lo que me fue a pasar hoy. El colmo de los colmos. Peor colmo que un ciego le cortara el pelo a un calvo. Para que se asusten. Bueno toda esta cólera se genero por algo simple. Mientas hablaba con el Caballero del Bosque este dijo que me había vencido en una batalla. Le di un poco de tiempo para ver si era broma o algo. Pero no era así, el lo estaba diciendo en serio. No tuvo otra alternativa que retarlo a un duelo. Y así lo hice, decidido a vencerlo. Le pedí a Sacho que me alistara todas mis cosas para la batalla. Tenía una furia increíble, a lo contrario de Sancho que estaba muerto de miedo y se fue a subir a un árbol el muy marica. Para mi felicidad y mi orgullo como caballero, salí victorioso de la batalla. Cuando cayó al suelo, en vez de matarlo le pedí que fuera donde Dulcinea y le digiera toda la verdad, así yo quedaría como un caballero digno de respetar.

Capitulo 13


De lo que me arrepiento hoy, es que se juntaron dos llorones. Como lo son Sancho y el escudero del Caballero del Bosque. Digo llorones porque siempre andan pidiendo o comido o dinero. Nunca se sienten satisfechos. No sé si es que quieren ser caballeros como nosotros, o tener los beneficios que nosotros gozamos. Ellos hablaban y hablaban de las recompensas. Desde lejos vi como Sancho movía las manos, exactamente igual que cuando habla conmigo de esas cosas. Soy un caballero muy observador y por eso es que vi ese pequeño detalle. Cuando estaba un poco más cerca de ellos, ya no estaban hablando de recompensas. No sé si era porque yo estaba cerca o qué, pero ya no estaban hablando de eso. Sancho hablaba sobre su familia. Sobre su hija especialmente, le estaba contando que si hija iba a ser Condesa, pero que primero ocupaba mi recompensa. Vi a Sancho un poco molesto, y creo que fue por como hablaba el escudero de mi compañero. Ya Sancho está acostumbrado a mi forma de hablar, y cuando escucha algo no apropiado se molesta. No podía faltar que hablaran del amor, el amor siempre está en nuestra mente. Siempre he pensado eso. No hay sensación más hermosa que la de estar enamorado. Se disfruta, se sufre, pero siempre va a seguir siendo algo precioso. Sancho y su acompañante tomaron y comieron hasta quedar dormidos, no sé si estaban ebrios o cansados, pero la cosa es que quedaron tirados en el suelo.

Capitulo 12


Después de ese percance. Pasamos la noche debajo de unos árboles. No es la mejor cama, pero por lo menos se descansa. Toda la noche, mientras estaba un poco aburrido, compare la comedia con la vida. Me parece muy interesante, a Sancho también le pareció interesante, solo que dijo que ya estaba demasiado vista. Siento que él lo ve de un punto muy distinto al mío. Hoy en la noche sancho me hizo sentirme muy orgulloso. Me manifestó como su conocimiento ha aumentado notablemente. Bueno, como no va a aumentar si pasa todo el tiempo con una persona muy culta como lo soy yo. Pero me parece muy bien, porque todo buen caballero, trasmite conocimiento y cultura. Hoy apareció El Caballero del Bosque. Nunca en mi vida había escuchado hablar de él. Se quejaba de su amada, que no recuerdo el nombre este momento. No se veía como una caballero cualquiera. Si tengo que confesar que su nombre me pareció un poco absurdo. Aproveche y converse mucho con él. Le conté y le di consejos de amor.

Capitulo 11


Cuando íbamos de camino a Zaragoza, se nos cruzo una carreta. Pero no una carreta normal, como esas que están decoradas muy hermosas, o con mujeres preciosos dentro de ella. Pues no, esta era una carreta horrible. Tenía monstros a dentro. Me asuste mucho al principio, pero luego nos dijeron que eran unos hombres que hacían obras de teatro. No me gustan mucho los personajes de la muerte por cierto. Después del susto con los hombres con sus mascaras de la muerte, apareció un hombre muy extraño que tenía un palo, este golpeo el suelo con el palo y Rocinante se asusto mucho. No estaba preparado y cuando Rocinante se asusto me caí del lomo de mi hermoso caballo. Cuando me levante, me levante sumamente enojado. Sabía que los actores tenían algo que ver con eso que me hicieron. Y estaba dispuesto a pegarles. Sancho fue el que me detuvo, si no hubiera sido por Sancho, no sé que les hubiera pasado a esos estúpidos actores. No soy un caballero que me gusta la venganza, pero tengo un pensamiento que siempre me va a caracterizar. El que me busca me encuentra, y así le ha pasado a muchos de los monstros, que creen que pueden burlarse de mí. Pero cuando se dan cuenta que yo no era un hombre que aguanta bromas pesadas, es demasiado tarde para escapar.

martes, 9 de noviembre de 2010

Capitulo 10


Antes de que Sancho le dije que viera la cara de Dulcinea. Yo estaba totalmente seguro que iba a poner una cara de enamorada, pero quería estar totalmente seguro. Después de lo que le dije Sancho partió. Fueron los minutos más largos de mi vida. Estaba a punto de ver a mi amada. Siempre sueño con su rostro, cara, pelo, hermosos brazos, y ni que decir su bella nariz. Se me hicieron eternos. Apuesto lo que sea que fueron como 3 minutos, pero para mí fueron como si hubieran sido 20 minutos. Estaba muy impaciente por verla y besarla. Hace tiempos que me muero por ella. Desearía darle besos todos los días de mi vida lo juro. Bueno, después de 3 minutos Sancho llego muy alterado diciéndome que Dulcinea se acercaba con dos mujeres más. Pensé inmediatamente que esas dos mujeres que decía Sancho eran sus sirvientas. Sin perder tiempo alguno empecé a decirles cosas hermosas. Los mejores piropos de mi repertorio. Las tres salieron corriendo. Estaba sumamente enojado con los encantadores, porque ellos son los culpables de que yo no pueda estar con Dulcinea. Seguimos el camino a Zaragoza, porque allí se iban a celebrar unas fiestas muy importantes.

Capitulo 9


Entramos a media noche al Toboso. Todo está totalmente oscuro. No me daba miedo, pero si sentía escalofríos. La noche estaba fría. Todos estaban dormidos en el palacio de Dulcinea. Pero como buen caballero y escudero, ahí estábamos despiertos Sancho y yo. Nos costó encontrarlo, debido a que no había ni una sola luz encendida. No tenia con que alumbrar, y mi memoria me fallaba en la ubicación del palacio. Tenía que estar por ahí cerca pero no apareció. Llegamos a la conclusión que ninguno de los dos la conocíamos en persona. Yo estaba enamorado de ella por mi fama y Sancho la conocía por comentarios escuchados. Sancho me hizo esperar, mientras él iba en busca de mi hermosa Dulcinea. Y así lo hice espere a que él fuera en busca de ella. Lo que Sancho tenía que hacer era ir a decirle que yo la estaba esperando afuera. No quiero imaginarme la cara de felicidad de Dulcinea cuando Sancho le diga esas palabras, cualquier mujer se enloquecería de amor si le dicen que su amado está afuera esperándola.

Capitulo 8


No podía partir sin recibir la bendición de la persona que más amo en este mundo. Como digo siempre, ella está en mi mente en todo momento. Puedo estar haciendo lo que sea, que ella siempre va a estar en mi mente en todo momento. Ya ustedes saben que estoy hablando de Dulcinea, si de la mujer que se robo mi corazón. Sé que está muy lejos de mí pero, cuando pienso en ella la siento muy cerca. Tuve que desviarme inmediatamente para ir a recibir su bendición. Cada vez que recibo su bendición me siento completo. Mi corazón y me cuerpo se sienten totalmente felices. Muchas cosas me provocan felicidad, pero Dulcinea es algo especial. Lo que siento cuando pienso en ella es inmensamente especial. Sancho pasó todo el viaje pensando en otra cosa. El pensaba en si el autor de nuestro libre había hablado bien de él. Lo vi y estaba un poco preocupado. No entiendo que le preocupa si el siempre ha hecho el bien. Yo aproveche y le expliqué que los caballero andantes somos capaces de dominar los pecados capitales. La mentalidad del pobre Sacho era totalmente diferente a la mía. El pensaba que si yo quería ser famoso de verdad tendría que ser fraile. Que es algo que me parece absurdo, porque conozco muchísimos caballero que son famosos, aun no me incluyo porque me faltan aventuras por concluir todavía. Si se es un buen caballero, se es famoso. En la noche llegamos a Toboso, descansamos un poco, y la cara de preocupación de Sancho no se le iba de su rostro. No tengo la menor idea del por qué.

Capitulo 7


Cuando llego Sacho nos fuimos a mi recinto. Yo estaba terminando de alistar todo para las aventuras. No crean que sea solo montarse a un caballo y zarpar. Hay que tener todo listo y completo. Siempre que estoy alistando mis cosas para una aventura tengo en mi mente un dicho que para mí es fundamental. Es famoso dicho que siempre está en mi cabeza es “es mejor prevenir que lamentar”, es por esa razón que prevengo siempre. Tal vez algo no sea tan necesario de llevar, pero uno nunca sabe si lo va a ocupar. Mi ama salió rapidísimo apenas llego Sancho. No tengo ni las más mínima idea a donde fue. Y la verdad ni me intereso en lo más mínimo. Para variar, Sancho llego y me pidió que le pagara. Por supuesto que no le iba a pagar ni medio centavo, si le pagara estaría rompiendo una tradición de años. Y no es como que me voy a morir si Sancho deja de ser mi escudero. Sé que es un excelente amigo, pero si no se adapta a mis condiciones tendré que conseguirme uno nuevo. Resulta que cuando íbamos saliendo me entere para donde fue mi ama. Se fue donde el Bachiller y este en lugar de detenerme, me animo a seguir, y hasta se ofreció a ser mi escudero. El pobre Sacho al escucharlo decir eso, me rogo que él quería seguir siendo mi escudero. Yo estaba totalmente claro que no quería perder a Sancho. Lo abrase inmediatamente y le di todo mi apoyo. Me hubiera encantado que hubieran visto la cara de mi ama y mi sobrina. Estaban paralizadas, no entendía como el Bachiller estaba de mi lado y no del lado de ellas. A los tres días partimos a Toboso. La única novedad es que Sancho llevaba una bolsa de dinero que yo le di para cubrir todos los gastos de la aventura. Que por cierto son muy caras.

Capitulo 6


Hoy estaba arto. Desde que desperté no desperté con la mejor actitud. Me sentía dolido. No sé si eran nervios de volver a mis aventuras, o simplemente un mal día. Para el colmo mi sobrina y mi ama me tenían arto. Solo me decían que no fuera a esas aventuras, que para ellas son estúpidas. Porque obviamente nunca en ido a una de ellas, y jamás saben lo hermosas que son. Solo me decían que era mejor que fuera a servirle al rey, y que así dejara de ser caballero andante. Es lo último que pasaría por mi cabeza. Voy a morir siendo caballero andante, es una promesa que tengo conmigo mismo. Me dijo una tontería, que solo por ser mi sobrina no me le fui encima de inmediato. No van a creer lo que me dijo. Me dijo que para ser caballero andante había que ser rico. ¿Qué clase de tontería es esa? Respire profundo, me controle lo más que pude y le di una explicación, para que nunca más en la vida volviese a mencionar algo así. La única explicación que tenía en ese momento, que no puedo mentir, estaba con un poco de cólera. Fue que yo había nacido bajo la influencia de Marte, eso significaba que las armas es lo mío. Y concluí diciéndoles, o más bien quitándoles la esperanza de que mi iban a convencer. El cielo es el que me dijo que yo debía ser caballero, así que lo respeto. Al rato llego Sancho. Mi buen amigo.

Capitulo 5


Le prometí a Sancho que le iba a dar una ínsula cuando termináramos las aventuras. Se fue a hablar con Teresa para explicarle que él y yo íbamos a volver a las aventuras. Ya era demasiada la falta que nos hacía. Nadie nos entiende, las aventuras para nosotros son lo que nos hace felices. Sin ellas, por mi parte yo me siento totalmente incompleto. No paro de pensar en un solo momento en todo lo bello que he pasado gracias a las aventuras. Como siempre Teresa y Sancho tuvieron una discusión. De lo poco que me conto Sancho, lo que me dijo muy claro fue que la mujer tenía una gran confusión. No sabía si su hija tenía que casarse con uno igual a ella o con un gran monarca. Ella es un poco lenta, para mi gusto. No entiendo como Sancho puede convivir con una persona así. Siempre me han gustado, y me gustaran las mujeres que son inteligentes, que puedan hablar sobre temas importantes, y que sea muy respetuosa y educada. Después de la discusión alistamos todo para nuestra partida. Estábamos muy emocionados porque sabíamos que nos esperaban cosas hermosas.